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La espiritualidad hemingwayana. De las huellas del iceberg a la contemplación del Misterio.

Ernest Hemingway continúa siendo uno de esos escritores-enigma a los que la   literatura de todos los tiempos le prodiga una especial atención. Hay, además, en todo estudio serio a su obra una singular triada de respeto/admiración/envidia que, a veces, es difícil desligar del verdadero sentido crítico, efecto que por demás tiene que ver con las preferencias o antipatías de sus críticos. Nos sigue quedando claro que al final se le admira de cualquier modo.                 Shutterstock | Kristina Tsvenger Lo del escritor-enigma, si es que el término tiene que ver más con la notoria sensación de los desconocido de su propio corpus literario, que con esas facetas que el escritor-personaje valida a lo largo de todas sus creaciones, y que muy bien ejemplifica su teoría siempre sugerente del iceberg  [1] ; es otra posible ambigüedad, donde lo espiritual es la terra incognita, y que ahora nos proponemos re-descubrir en el presente ensayo. Hemingway no es reducible a una u otra corriente es

La Guerra Civil Española en los cuentos de Ernest Hemingway: algunos relatos españoles y uno cubano

  Por la Casa del Campo Y el Manzanares Quieren pasar los moros Mamita mía y no pasa nadie. Los Cuatro Generales. Copla del Madrid Republicano.ca 1937.   Ilya Ehrenburg, corresponsal de 'Izvestia', Ernest Hemingway y el brigadista alemán Gustav Regler en España en 1937.   Ernest Hemingway Collection La vitalidad narrativa de Ernest Hemingway nos sorprende siempre por donde menos pensamos. Conocidas hasta casi una saciedad siempre portadora de nuevos elementos renovadores, sin embargo, las historias cortas del gran narrador que fue Hemingway, dan pie una y otra vez para llegar a entenderlas con una nueva luz. Este es el caso de las que hubiera de signar en la línea de la Guerra Civil Española, un grupo sui géneris de relatos donde la coordenada del suceso histórico que él cubriera desde su condición de reportero de la NANA [i] , no demeritan nunca al sujeto literario que emerge en ellas, con la fuerza y la credibilidad inevitables que le otorgaban tal condición. Lo